El secreto de la cerveza

El secreto de la cerveza

¿Qué oculta la jarra llena de la bebida dorada?

El secreto de la cerveza
¿Te gusta la cerveza? ¡Si tu respuesta es afirmativa, continúa leyendo! Te revelaremos el secreto de la fabricación de cerveza, recomendaremos los mejores restaurantes y presentaremos las cervezas especiales checas de mayor prestigio.

Una liana envuelta en mitos

Mucha gente piensa que para fabricar cerveza se necesita sobre todo lúpulo. Los frutos verdes de esta planta tipo liana, sin embargo, se agregan a la cerveza solo en calidad de especias. No más de cuatro se necesitan para fabricar medio litro de cerveza. En tiempos remotos se necesitaba mucha mano de obra para cosechar lúpulo en el mes de agosto, por eso en Chequia surgió el fenómeno de trabajos temporales en la cosecha de lúpulo. Antes del inicio del año escolar, los estudiantes se iban a participar en la cosecha de lúpulo. Si te interesa el tema, visita el Templo del lúpulo y la cerveza en Žatec. Justo en el corazón de la región de lúpulo de mayor prestigio en Chequia podrás enterarte de todo lo que necesites saber sobre la cerveza y el lúpulo.

Dočesná - fiesta de la cerveza en Žatec
žatec

¡El agua es la base!

El agua que es el elemento básico para fabricar cerveza, por lo tanto debe tener la mejor calidad posible. Determina el sabor y el aroma de la cerveza. Cada fábrica de cerveza, por lo tanto, cuida mucho la fuente del agua que utiliza. Muchas fábricas de cerveza participan activamente en las actividades que contribuyen a la salvación (protección) de la riqueza natural

¡Te damos una idea! 
En el Centro de Visitantes de la fábrica de cerveza Budvar podrás participar en un viaje virtual a 300 m de profundidad. Es la profundidad en la que brota el agua cristalina, de un pozo artesiano que data miles de años, dando el mejor sabor a la mundialmente famosa cerveza de aquí. 

brewery

La esencia del oro

La tercera materia es la malta que se fabrica con especies de trigo que se cultivan especialmente para tal fin. ¡A ella se debe ese espléndido color dorado de la cerveza! Las manos de los maestros cerveceros y la levadura se encargarán de lo demás. Cada fábrica de cerveza tiene su procedimiento de producción original, gracias a ello cada cerveza tiene su sabor específico. No te preocupes, muchas de ellas no mantienen sus secretos guardados sólo para sus propis fines. Organizan visitas especiales donde te revelarán los misterios de la producción de cerveza y así mismo podrás probar su cerveza.

beer

¿Prefieres una “hladinka” (jarra llena), un “Šnyt” (jarra a medias) o “mlíko” (más espuma)? 

¿Sabes que la técnica de despachar cerveza también influye en el sabor final de la cerveza? Un buen bodeguero puede ofrecerte cuatro sabores diferentes en una noche, no importa que por la pipa pasa un solo tipo de cerveza. “Hladinka” – mejor dicho es la técnica básica, o sea que la jarra contiene cerveza y espuma en la proporción correcta. El “Šnyt” es espuma y cerveza en la proporción de 1:1 aproximadamente. El sabor es más dulce y no es necesario beberse tan rápidamente la cerveza, la espuma la protege contra el aire. “Mlíko” – es prácticamente pura espuma. El último modo típico checo de despachar cerveza es čochtan, cerveza sin espuma, destinada al consumo rápido para saciar la sed. Algunas fábricas de cerveza o pubs ofrecen también cursos de despachar cerveza, por ejemplo la red de restaurantes praguenses Lokál o la fábrica de cerveza Radegast en Moravia.

pivo

Cervezas especiales – placeres favoritos

Las fábricas de cerveza fabrican cervezas especiales cada año para diversas ocasiones. Estas cervezas especiales son muy populares. Las cervezas especiales de Pascua son primaverales, livianas y frescas. Algunas son también de color verde porque los maestros cerveceros utilizan no solo lúpulo sino también otras plantas, por ejemplo ortigas nuevas. Las ediciones de verano suelen ser más ácidas, frescas y de poco alcohol, para saciar bien la sed y armonizar con la serenidad veraniega. En fin, las cervezas especiales de otoño y de adviento son más enteras y, en muchas ocasiones, sazonadas con miel y especias. 
 
pivovar

¿Preparar tu propia cerveza? Ningún problema.

Para 12 litros de cerveza necesitamos
de 650 a 850 g de cebada cervecera
12 litros de agua blanda
100 g de lúpulo
De 250 a 300 g de azúcar cristalino
20 g de levadura

Cómo se hace
Prepare la malta de la siguiente manera:  En un recipiente, preferiblemente de madera, vierta agua sobre la cebada malteada de grano puro (unos 650 a 850 g para 12 litros de cerveza) y déjela en remojo durante 24 horas. A continuación, se escurre el agua y se deja germinar la cebada durante otras 24 a 36 horas en el mismo recipiente o en una bolsa de lona húmeda, removiendo la cebada con frecuencia para romper el germen. Esto interrumpe la germinación y favorece la formación de azúcar. A continuación, tueste la cebada suavemente hasta que esté dorada. Tostar demasiado la cebada da a la cerveza un color más oscuro, pero también un buen sabor.

Triturar la cebada tostada y empezar a elaborar la cerveza: Hervir la cebada en 12 litros de agua blanda durante aproximadamente una hora. Utiliza sólo una olla esmaltada, que no debe estar maltratada por dentro, para que la cerveza no adquiera un sabor a hierro. Al mismo tiempo, en otra olla esmaltada, hervir 100 g de lúpulo de la última cosecha (si el lúpulo es más viejo, hasta 150 g) en una bolsa de lino más fina en un litro de agua durante 20 minutos. El procedimiento puede simplificarse: hervir la cebada cervecera triturada durante sólo una hora. A continuación, vierta el lúpulo y el azúcar en la misma olla y hiérvalo todo durante otra hora.

Este litro de decocción se vierte entonces en el agua en la que se ha hervido la cebada malteada y se cuela a través de un paño limpio. Se añaden de 250 a 300 g de azúcar granulado a la decocción colada y se hierve durante otras dos horas.

Durante el proceso de ebullición, hay que tener en cuenta la evaporación, retirar la espuma y rellenar el agua hirviendo para que siempre haya 12 litros de líquido en la olla.   Colar la decocción y dejarla enfriar. Incorporar al agua tibia 20 g de levadura triturada. Tapar la olla con una servilleta de tela y dejar fermentar durante 24 horas. Quitar la espuma y verter la decocción en botellas, dejando de 1 a 1,5 dl de espacio vacío en el cuello, tapar bien y refrigerar durante 14 días.