El Baile checo – eslovaco se está convirtiendo en uno de los eventos más populares de la temporada de los bailes en la República Checa. La actual situación epidemiológica pospone la fecha de febrero a abril.
La octava temporada del Baile checo - eslovaco ya tiene su fecha, el 30 de abril de 2022. No se trata solo de un evento social – simboliza también las relaciones extraordinarias entre ambos países y sus habitantes quienes hasta el año 1992 compartían el mismo país.
El Baile checo - eslovaco es la continuación de los bailes eslovacos que se celebraban en Praga desde el año 1969 hasta el 2010. La idea para profundizar las relaciones entre ambas naciones se creó el 23 de abril de 1969 en el Palacio de Černínský en el Castillo de Praga. Muchos persanajes del ámbito cultural y social de la antigua Checoeslovaquia participaron en el primer baile que se convirtió en la tradición durante casi cuarenta años.
La elegante y lujosa Casa Municipal al lado de la famosa Torre de Pólvora en el pleno núcleo histórico fue elegida como lugar idóneo para organizar este evento. El programa principal se lleva a cabo en la Sala de Smentana.
El evento se celebra bajo el patrocinio de los presidentes de ambos países: presidente checo Miloš Zeman y presidente eslovaca Zuzana Čaputová.
El Baile checo - eslovaco es la continuación de los bailes eslovacos que se celebraban en Praga desde el año 1969 hasta el 2010. La idea para profundizar las relaciones entre ambas naciones se creó el 23 de abril de 1969 en el Palacio de Černínský en el Castillo de Praga. Muchos persanajes del ámbito cultural y social de la antigua Checoeslovaquia participaron en el primer baile que se convirtió en la tradición durante casi cuarenta años.
La elegante y lujosa Casa Municipal al lado de la famosa Torre de Pólvora en el pleno núcleo histórico fue elegida como lugar idóneo para organizar este evento. El programa principal se lleva a cabo en la Sala de Smentana.
El evento se celebra bajo el patrocinio de los presidentes de ambos países: presidente checo Miloš Zeman y presidente eslovaca Zuzana Čaputová.
