El Geoparque Egeria es una de las zonas geológicamente más activas del Macizo Checo. Aunque aquí las manifestaciones geológicas más potentes cesaron hace cinco millones de años, todavía hoy se puede encontrar con fenómenos tectónicos, volcánicos, manantiales de aguas termales y actividades sísmicas. Basta con ponerse calzado resistente o montar en bicicleta e irse a observar este fascinante espectáculo natural. Pasee, p.ej., entre volcanes de lodo burbujeante de la reserva SOOS, pasa en bicicleta de montaña a lo largo de un desfile de bodas petrificado en las rocas Svatošské skály, vuelve a la época glacial en el tremedal de Boží Dar, cerca de la ciudad más alta de Europa Central, o busca con el olfato la localidad forestal con el nombre acertado de Smraďoch, en español, Pestilente, donde brotan gases de sulfuro de hidrógeno.
De elegantes balnearios a una naturaleza salvaje
Puede elegir como punto de salida alguna de las célebres ciudades balnearios. Ya sea Karlovy Vary con su Vřídlo, es decir, Hervidero con una temperatura de 72oC, Mariánské Lázně con su parque geológico o, por ejemplo, Jáchymov, cuna de la minería mundial. El Geoparque Egeria no tiene límites señalados, pero conforma un conjunto armónico libremente accesible para los visitantes curiosos, así como para aquellos que buscan actividad en un ambiente atractivo.
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