Palacio de Konopiště

Palacio de Konopiště

Eche un vistazo al dormitorio de Francisco Fernando D´Este en el Palacio de na Konopiště

Visite el palacio en el que fue instalado uno de los primeros ascensores eléctricos, la luz y conductos de agua. Pasee por las habitaciones, el comedor y la armería e imagínese por un momento la vida en el palacio antes de la Primera Guerra Mundial. Después en el museo oficial de la fábrica de la marca JAWA, podrá admirar únicos objetos expuestos, trofeos y documentos históricos de las motos checas más conocidas.

El Castillo de Konopiště, fundado como una fortaleza gótica, inspirado en las fortalezas francesas con torres simétricamente ordenadas, una multitud de escaleras y puentes levadizos. Gracias a varias reformas, se fue transformando en un palacio romántico con interiores lujosamente amueblados y adaptados para la vida cotidiana.

Konopiště en la historia moderna

El heredero del trono, Francisco Fernando de Austria cuyo asesinato en Sarajevo dio motivos a la Primera Guerra Mundial, eligió el Palacio de Konopiště como su residencia. El segundo conflicto mundial dejó también sus huellas en Konopiště, ya que el palacio fue también residencia de las unidades de combate SS en aquella época.

Francisco Fernando D’Este quería superar al rey inglés

Francisco D’Este fue un apasionado cazador y coleccionista. Durante la visita del palacio, podrá admirar sus singulares colecciones de armas en la armería Estenská zbrojnice que pertenece a las más grandes de Europa. Francisco Fernando mandó construir una extra habitación destinada a albergar más de 1000 piezas de retratos de San Jorge con las que, según dicen, quería superar la colección del rey inglés. El Gran Pasillo de Trofeos es, por otro lado, testimonio de la enorme pasión cazadora de Francisco Fernando, quien durante su vida abatió a casi 300 mil animales. Los salones representativos con los excepcionalmente valiosos gabinetes italianos, el Gran Comedor con pintura de techo y cuartos de estar de la familia de Francisco Fernando le acercarán la vida cotidiana en el palacio de aquel entonces.

Para ver un oso en los jardines de Konopiště

Al visitar el palacio, no puede pasar por alto el entrar en el extenso jardín palaciego con faisanes, pavos reales y codornices que se mueven libremente por el jardín. Los Jardines Rosa invitan al descanso con su agradable olor. También podrá planificar un picnic a orillas del cercano estanque o refrescarse en el nuevo Restaurante de Palacio, en el patio.